Google+ Google+

TRADUEIX / TRANSLATE

divendres, 5 de setembre del 2014

UN DEBAT INVENTAT QUE NO EXISTEIX

PUBLICAT A "AHORA VALENCIA"

La Acadèmia Valenciana reafirma: "El valenciano es catalán"

  • Después de que la consellera de Cultura asegurase que deben rectificar su definición del valenciano, la AVL se reafirma en que el valenciano es catalán

La Acadèmia Valenciana de la Llengua ha contestado a la consellera de Cultura, María José Català, quien aseguraba hace unos días que podría quitarles el presupuesto si no corregían la definición de “valenciano” que aparece en el diccionario normativo que la AVL ha editado y que lo equipara al catalán. Lejos de parecer intimidados o solidarios con la defensa de la lengua valenciana y nuestras señas de identidad y cultura, la Acadèmia se ha mostrado completamente indiferente e, incluso, incisiva con la consellera del Partido Popular, asegurando que lo hace por “la campaña electoral”.
Los académicos, según cita el diario ValenciaPlaza en su página web, han respondido “con frialdad e indiferencia” a las declaraciones de Català, asegurando incluso, en base a la noticia publicada por este portal, que está “haciendo el ridículo”. De momento, no obstante, no hay comunicado oficial de la Acadèmia, y la entidad podría no enviarlo nunca, ya que para ellos “es un debate inventado que no existe”.
El debate que sí existe es esa “opción” que dijo Català de quitarles parte del presupuesto que reciben de fondos públicos por esa polémica definición del valenciano, lengua que aseguran que también se habla “en Cataluña” y otros territorios como Baleares o Aragón. “El debate sobre la lengua es cosa nuestra”, apunta un académico al diario antes citado. ¿Está el Gobierno por encima de una institución lingüística? “Lo que se aprobó es lo que se queda”, dice ValenciaPlaza, confirmando que “no cambiarán en ningún caso la denominación del valenciano” ¿Se puede consentir que una Acadèmia Valenciana diga que nuestra lengua es igual que el catalán? Ése es el auténtico debate, que algunos quieren pasar por alto. Aunque quizá no les quede otro remedio que entrar en él de lleno.